Sentido a la vida
Si recibes el don del amor, tendrás amor a la vida. Tu corazón no estará más vacío. Tendrás sentido a tu vida. Es importante saber porqué vives.
Sabrás que eres ¡¡amada!!, que alguien te espera, que tienes una misión en la vida. Jesús murió y resucitó, está en vida, Él es el amor, Él es la Resurrección y la Vida. Jesús murió y resucitó para darnos la vida verdadera.
Antes de formarte en el seno materno, Yo te conozco, y tengo una misión para vos» (Jeremías 1:4).
Compartir toda la vida
Si le pides a Dios amor a la vida, querrás compartir la vida con un esposo que amas.
Satanás te propone placer sin amor y sin fruto del acto conyugal.
– El matrimonio es el gran sacramento de la VIDA.
– No solamente sexo, sino vida.
– Amar es compartir un estilo de vida.
– Amar es dar la vida.
– Compartir el amor del cuerpo y el amor del alma.
Dar vida con amor
Pídele a Dios amor a la vida.
– Querrás dar vida con amor a cuantos hijos Dios te dé.
– Querrás casarte para dar la vida, dar tu vida.
– Dar la vida a los hijos, dar tu vida por tus hijos.
– Dar tu vida por amor a Jesús, que dio su vida por vos.
– Tendrás amor a tus hijos, a tu entorno.
Educar es dar vida
Educar es dar vida. Esos hijos necesitan autoridad, para tener vida en abundancia y crecer en el amor.
Si pides a Dios amor a la vida, sabrás educarlos con pequeños gestos o palabras de autoridad, pero con amor, no con pasión. Sabrás educarlos como Dios quiere. Les transmitirás tu amor a la vida. Sabrás educarlos en la fe, enseñarles a hacerlo todo por amor a Dios.
También los que viven en concubinato
Los que viven en concubinato, Dios los ama como ama a todos. A veces no pueden recibir los sacramentos, pero no son excluidos del ¡¡amor!! de Dios.
Pidan el don del amor, amor a la vida, para dar vida con amor, para educar a los hijos con amor, para dar la vida, para educarlos como hombres y mujeres responsables, como cristianos que aman a Jesús.
Vivir una vida de amor
¡Madre!, que diste la vida al que es la Vida,
– Haz que, como vos, me enamore de Jesús.
– Dame amor a la vida.
– Enséñame a vivir una vida de amor.
– Enséñame a vivir el Evangelio en toda la vida.
– Enséñame a ofrecer con amor todas las acciones cotidianas.
– Enséñame a educar nuestros hijos en ofrecer sacrificios por amor a Jesús.
– Haz venir el nuevo Pentecostés prometido.
– Pentecostés de amor, amor a la vida.