Me siento vacía, ¿porqué? Me siento vacío, ¿porqué?
– PORQUE TE FALTA DIOS, porque Dios no está en tu vida.
– Lo llaman “estrés”, pero el hombre sin Dios no es nada, está vacío.
– El hombre está creado para Dios, por eso está vacío cuando no deja lugar a Dios.
– Nuestro corazón está herido por faltar de su Creador, y del amor Redentor.
– Nuestros corazones están heridos por el pecado.
– El hombre desea ser independiente de Dios, por eso está triste, está vacío.
– Lo que necesita es encontrarse con aquel que ha nacido para dar la vida eterna, aquel que ha nacido de María, que ha querido ser no más que los hombres, con una mamá, con un papá san José, dentro del seno de una familia, para acompañarnos con su amor en el camino de la vida, de la vida eterna…
¡JESÚS! … ¡VEN A ACOMPAÑARME!
– El hombre está vacío de Dios, vacío de amor.
– Por eso el egoísmo, por eso la búsqueda de placer, por eso el autoritarismo: “yo quiero, yo necesito”. No es la búsqueda de la voluntad de Dios como hacen los santos, sino “yo deseo, yo tengo, yo quiero, yo, yo, yo…” Esto es ambición.
– Quieren ser dioses, y hay vacío de Dios. Eso es amor propio. Debemos aprender a pedir el don del amor.
– Muchos buscan ser amados porque quieren llenar un vacío, pero no saben que ese sentimiento, sólo Dios lo puede colmar. Si falta Dios, falta el amor. Por más que otras personas los puedan contener, nunca los van a satisfacer, porque son como frascos vacíos.
– Aun cuando tenga familia, hijos, amores, mujer o hombre, no encuentra esa felicidad, porque no ha dejado que nazca Él en el corazón.
- VACÍO + VACÍO = DOBLE VACÍO
¡JESÚS! … ¡VEN A HABITAR MI NADA!
– Otros buscan primero trabajo y después vida espiritual. No es que no tienen nada, sino que están vacíos de lo que Dios quiere. Están llenos de lo que dice el mundo, pero no escuchan a Dios. Quieren ser escuchados, pero no saben escuchar. Pero el que busca vida espiritual, todo lo tiene.
Por eso Jesús ha nacido, él es la vida, él es el camino, él es la luz del mundo. Si recibes el don del amor de Dios, saldrán de tu corazón ríos de amor. No estarás vacío y vas a irradiar y colmar a los demás.
Jesús dice: «El que beba del agua que yo le daré, nunca más tendrá sed. De su corazón brotarán manantiales de agua viva» (Juan 4,14; 7,38)
¡JESÚS! … ¡TENGO SED!
– Deja que Jesús toque tu corazón vacío, vacío de amor.
– No es que el Padre no da, sino que no sabes pedir al Padre. Por eso hay tanto vacío y tanta necesidad en tu corazón, que está rodeado de muchas cosas pero no sabe utilizar esta vida, para compartir con ese hombre o esa mujer.
– Debemos aprender a pedir amor, y si es la voluntad de Dios, de su amor, compartirlo con otro ser, hombre o mujer.
– Este vacío, llénalo con la presencia de Él, para que mire por tus ojos y hable por tus labios.
«Deseo que cada uno de ustedes descubra la mirada de Jesús que lo mira con amor, y que la experimente hasta el fondo. Hagan la experiencia del amor de Dios» (Juan Pablo II, Carta a los jóvenes,)
¡JESÚS! … ¡MIRAME!