Nuestra vida fraternal
«Ven y sìgueme»: Jesús nos llama a El para llevar a la unidad a los hijos dispersos de Dios. Tenemos la misión de acercar a los hombres los unos a los otros. Es por eso que decidimos vivir primero nosotros mismos en comunidad, comprometiéndose cada uno de alguna manera por un acto de amor a amar al otro con todas sus fuerzas, hasta el fin, hasta dar su vida por él.